Cultivamos la Romanica® de mediados de abril a octubre en Büttelborn (Hesse), Gresse (Mecklemburgo-Pomerania Occidental) y Bornheim (Renania des Norte-Westfalia). La Romanica® ecológica crece en nuestros campos en y alrededor de Gallin/Kölzin. Cuando en Alemania hace demasiado frío para cultivarla, crece bajo el sol español en nuestra instalación de Balsapintada (Murcia).

La gestión del cultivo se ve favorecida por un clima templado, ya que la Romanica® es sensible a los cambios de las condiciones externas. Las plantas jóvenes crecen perfectamente en suelos un poco más ligeros.

Para preparar la Romanica®, corta el tallo por la parte inferior. Después, lava las hojas enteras con agua fría y utilízalas como quieras.

La Romanica® es increíblemente versátil. La mayoría de las veces se usa como ingrediente en ensaladas. Sin embargo, gracias a la estructura firme de las hojas, también se puede cocinar en caliente: solo tienes que saltearla brevemente en una sartén y condimentarla bien para tener un manjar extraordinario en el plato. Esta lechuga también es un buen aperitivo, por lo que complementa el bufé de cualquier celebración.

La Romanica® no se desmorona tan rápido gracias a su estructura firme, por lo que puede guardarse fácilmente en el frigorífico durante varios días. Para ello, lo mejor es dejarla siempre en el film transparente que trae, ya que sirve, entre otras cosas, para mantenerla fresca durante más tiempo. Si solo sacas una lechuga, puedes envolver la otra en film transparente y guardarla unos días en el compartimento de las verduras.