Rábano

Detalles interesantes

El rábano pertenece a la familia de las crucíferas y es una planta cultivada muy antigua que ya era conocida por los egipcios. En Alemania no se utilizó como hortaliza hasta el siglo XIII. Además, es especialmente popular en el este de Asia, China y Japón: el consumo anual per cápita es de hasta 30 kg. En Alemania, en promedio, solo se comen 250 gramos de rábano blanco por cabeza al año.

 

Hay rábanos de distintos colores y formas, pero el más conocido es el rábano blanco, también llamado rábano japonés, con su forma blanca de unos 45 cm de largo y un sabor más suave. Este es el rábano que cultivamos. Sobre todo para el Oktoberfest, se ofrece como complemento de la cerveza y el pretzel. Además del rábano blanco, también hay rábanos rojos y negros, en forma alargada o esférica, así como la variante más corta del rábano blanco, el rábano piccolo.     

 

En Asia, es imposible imaginar la dieta sin rábanos debido a su agradable sabor picante. Sin embargo, el rábano también encuentra cada vez más adeptos en Alemania, probablemente por su carne blanca y jugosa y por los sabrosos aceites de mostaza que contiene, y que le dan ese toque picante.

Nuestro rábano crece en los campos en y alrededor de Winsen/Luhe (Baja Sajonia). Ahora ya está bien adaptado al clima centroeuropeo y prefiere los suelos ricos en humus y profundos. Debido a su impresionante tamaño, el rábano necesita una buena preparación del suelo con un suelo profundo y una buena distribución del agua para poder crecer perfectamente en él y no echar raíces laterales.

 

El rábano solo se cultiva en siembra directa. Su cosecha todavía se realiza a mano y se requiere mucha fuerza y habilidad para sacarlo del suelo intacto. Después, se lava directamente en el carro de cosecha y se prepara para su transporte.

Preparar el rábano es muy sencillo. Primero, corta la parte verde y el extremo de la raíz. A continuación, pélalo con un pelador y córtalo en rodajas a tu gusto. 

 

El rábano se suele usar como acompañamiento de un bocadillo. Si quieres suavizar un poco el picante, puedes espolvorear las rodajas de rábano con un poco de sal. También se puede cocinar al vapor para acompañar la carne o el pescado. Puedes encontrar muchas ideas increíbles en nuestra página de recetas. ¡No te la pierdas!

 

Un rábano fresco se reconoce porque es abultado, firme y no se dobla. Como es obvio, el rábano fresco sabe mejor, pero puedes guardarlo en el compartimento de verduras del frigorífico durante varios días.

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País de origen
Alemania
España
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